Ay, que bonito es Paris. En el fin del año fui con Raquel y algunos amigos alemanes y franceses alli. El 27 de diziembre llegamos Raquel en avion de Valencia y yo en tren de alemania a la cuidad de amor. Nos costó unas horas encontrar el hotel pero al final lo conseguimos. Los días siguiente ibamos por Paris con nuestra guia francesa de papel viendo todos los edificios y rincones que hay que ver cuando se va a Paris.
El primer día ya aprendimos que todo vale mucha pasta en Paris. Por eso fuimos el dia dos de nuestro viaje a un supermercado para comprar la comida. Elegímos los sitios mas guapos (y frios) xa comidas y cenas. A restaurantes solamente fuimos para pedir abrebotellas por que vino tinto hay que beber con los quesos y baguettes, los alemanes sean tan sanos como sean.
El 29 llegó mi amigo alemán Cristo y cambiamos nuestro guia ingles por una francesa, Amelie. Recorrimos toda la ciudad. Aqui se ve el pirámide dentro del patio del palacio de Louvre que también es la entrada al museo. Nosotros solamente vimos una parte pequeña del museo por que es gigante. Creo que cada día entra tanta gente como a la playa de valencia. El 30 de diciembre Amelie nos llevó a su casa en las afueras de Paris para cenar con su familia. Fue muy divertido y hasta el perro todos estaban supercariñosos.
La noche vieja celebramos en la casa de un amigo, Lagda (derecha abajo), de la novia, Amelie (medio abajo), de Cristo (arriba). Empezamos a cenar a las nueve y acabamos a las cinco (por la mañana). Había patés de pato, pescados y companía. Ni los franceses conocían todas las cosas que cenamos. Salían todos los sabores y colores que me puedo imaginar. Hablamos en ingles, alemán, español... pero sobre todo escuchamos un partido de tenis en frances... nos enteramos de poco ;)
